La derecha, tras sus días eufóricos marcados por la presencia de su "lider carismático" una vez más se identifica en exclusiva con España y pretende hacernos creer a todos que lo que es su deseo desde que perdió el poder lo es también el nuestro.
Las encuestas le dan una gran ventaja, pero porque hay una diferencia abismal entre los votantes de izquierda y los de derecha: los primeros pasan factura a sus partidos si lo hacen mal, mientras que los segundos, pase lo que pase, siempre le apoyan.
¿Qué ha demostrado el PP en estos últimos años? que es el campeón de la crispación, que sabe manipular y engañar como nadie pero curiosamente siempre terminan siendo las víctimas. Lo que más me fastidia es que al final consiguen sus objetivos: que la sociedad piense que todos los políticos son iguales pero que de entre lo malo, lo menos malo sea lo suyo; generan el desencanto en la política, pues cuanto menos piense la gente mejor, ya con rezar tienen bastante, piensan los dirigentes derechosos y siempre habrá buenos y malos, y eso les interesa porque saben que tienen resortes mediáticos más que suficientes para conseguirlo.
La euforia les puede, probablemente ganen las elecciones que tanto desean, y cuando otros le hayan hecho el trabajo sucio de los recortes y reformas impopulares, vendrán y dirán lo de siempre, que ellos son magníficos y los únicos que pueden salvar a España, y muchos españoles de buena voluntad se lo creeran, pues este partido, como ninguno, tiene una gran capacidad de crear opinión, tribunas tiene para ello y bien que las aprovecha.
En este país nuestro los sectores sociales más a la derecha siempre serán privilegiados porque siempre se da por sobreentendido que la corrupción, la crispación el engaño y la manipulación es algo connatural a ellos y por tanto está más que amortizado electoralmente y si acaso llega alguno de sus asuntos a los tribunales, pues nada siempre pueden contar con unos cuantos amigos que le echarán una mano, siempre dirigida por sus juristas que no dan la cara, pero si el palo.
En fin que tras estos días, la derecha eufórica presiona a todos los niveles posibles, eso si, siempre diciéndonos que son de centro pues les interesa mucho mostrar esa idea de que sólo ellos son demócratas. El tiempo lo dirá.